Nadie se olvida de lo bueno.
Nadie se olvida de lo feo.
Nadie puede borrar porque si
los recuerdos sean estos buenos o malos.
Tu atesoras en tu mente
los hermosos momentos vividos.
Y los malos también permanecen
como fiel testimonio de aquello
que tanto mal nos hizo.
No pretendas ocultar los recuerdos.
No intentes obviar aquello que te hizo daño.
Todo sirve.
Porque todo forma parte de lo mismo.
Tu vida.
Tus experiencias de vida.
Borrar todo lo malo es negarte
el privilegio de no volver a cometer
los mismos errores pasados, una y otra vez.
Y si por el contrario borras lo bueno
un gran vació se apoderará de tu vida
sin tener hermosos alegres
momentos para recordar y compartir.
Recuerda siempre recuerda...
que nada en tu vida ocurrió porque si...
Todo fue a consecuencia de...
Aprende a convivir con tus recuerdos
viviendo un presente pleno fe, alegrías
y esperanzas para ser cada día
un poquito mejor en tu vida.
KASPER
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