Historias de vida: El Tatuaje de la Mujer Mariposa

La muerte ha retado cuatro veces a Kelly Davidson y siempre ha salido derrotada. Esta

Kelly Davidson (Why We Ink / Facebook)

mujer canadiense ha rebasado cuatro diagnósticos de cáncer que, en vez de quebrarla, han reforzado sus deseos de vivir. Una foto de su torso desnudo, tatuado con una imagen evocadora de sus sucesivos renacimientos, ha generado un alud de apoyo en Internet.
La semana pasada Davidson publicó la imagen en la página Why We Ink (Por qué nos tatuamos) en Facebook. “Mi tatuaje simboliza una transformación, mi metamorfosis, como una mariposa he cambiado mi aspecto, pero en el interior sigo siendo la misma”, escribió al pie de la foto, compartida por cerca de 100.000 usuarios de esa red social.

Davidson recibió el primer diagnóstico de cáncer en el umbral de su adolescencia: padecía la enfermedad de Hodgkin, un tipo de neoplasia que ataca el sistema linfático de las personas afectadas. Gracias al tratamiento con radiaciones pudo recuperarse y continuar su vida de manera casi normal, solo interrumpida por chequeos médicos anuales para comprobar la desaparición del mal. En uno de estos análisis rutinarios le detectaron cáncer de seno en 2011.

“No podía creer lo que estaba sucediendo… nuevamente”, confesó en un mensaje a la Fundación Regional del Cáncer de Ottawa, la capital canadiense. Los doctores le mencionaron la posibilidad de que el tumor fuese consecuencia de las radiaciones recibidas una década atrás. “Pensé que esto podía ocurrir, pero más tarde, no cuando tuviera 28 años”, se lamentó.

Davidson fue sometida primero a una mastectomía parcial, en su seno derecho, y luego por prevención también perdió el izquierdo. Durante la recuperación le detectaron un cáncer de tiroides y un carcinoma de células basales, la neoplasia más común en la piel. La noche después de su cirugía inicial se reencontró con su familia. “Todo el dolor y las lágrimas desaparecieron porque verlos me hizo sentir que todo iba a estar bien”, relató.

En vez de una reconstrucción estética, esta perseverante mujer prefirió cubrir las cicatrices en su pecho con un tatuaje sobrevolado por mariposas. “Es mi insignia de honor y fuerza, una obra de arte hermosa que llevo con orgullo pues representa cómo derroté al cáncer y cómo los senos no definen quién soy como persona o mujer”, escribió en Why We Ink.

Esa página en Facebook fue creada por Jules Fitzsimmons, una directora de reparto residente en Toronto, quien perdió a su hermano Owen en 2010 a causa del cáncer. Fitzsimmons descubrió cómo muchas personas recurrían a los tatuajes para perpetuar la memoria de sus seres queridos caídos en la lucha contra esa enfermedad. La comunidad reúne a cerca de 9.000 personas, cuyas contribuciones podrían alimentar un libro cuya distribución ayudará al financiamiento de grupos de respaldo a pacientes y familiares.

Las repetidas citas con la muerte no han ensombrecido el carácter Davidson. Por el contrario, la han obsequiado con un inapreciable premio: la intensidad. “No me tomo las pequeñas cosas de la vida demasiado en serio, vivo cada día al máximo, sonrío y amo… mucho, y nunca doy nada por sentado”, resume su filosofía vital. ¿Y si la adversidad retorna? “Lo enfrentaré con toda mi fuerza y mantendré una actitud positiva”, asegura.

FUENTE: Yahoo Noticias